Por Alexia Vega, Educadora de salud comunitaria
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), 1 de cada 10 personas tiene diabetes, esto representa alrededor de 30.3 millones de personas y 1 de cada 3 tiene prediabetes. La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa en la sangre son demasiado altos. En el Diabetes tipo 1 se cree que es causada por una reacción autoinmune que hace que nuestro propio cuerpo ataque a las células encargadas de crear la insulina localizadas dentro de nuestro páncreas. La insulina es una hormona necesaria para permitir que la glucosa entre en nuestras células y proporcione la energía que nuestro cuerpo necesita para funcionar efectivamente. Es importante entender que la diabetes tipo 1 no es prevenible, sin embargo, el tipo 2 que representa el 90 al 95 % de todos los casos, lo es. En el tipo 2, el páncreas libera insulina, pero no la suficiente, o también puede desarrollarse al haber resistencia a la insulina que surge cuando las células no responden a la insulina adecuadamente. Esto hace que la glucosa permanezca en nuestro torrente sanguíneo aumentando nuestros niveles de glucosa y eventualmente puede conducir a muchos problemas de salud perjudiciales si no se controla. Algunos de estas complicaciones pueden ser ceguera, pérdida de extremidades, accidentes cerebrovasculares, daño a los nervios e insuficiencia renal.
Algunos de los factores de riesgo modificables para la diabetes tipo 2 son la obesidad, un estilo de vida sedentario, el tabaquismo y el estrés. Trabajar en estos factores de riesgo modificables disminuirá el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Para aquellas personas que ya tienen diabetes, el tomar control de estos niveles ayudará a controlar la afección, disminuir y retrasar el riesgo de complicaciones futuras.
Algunos de los factores de riesgo no modificables para el tipo 2 son la etnia, la edad y la genética. Los hispanos, afroamericanos, nativos americanos e isleños del Pacífico tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Por eso es importante tener en cuenta todos los factores de riesgo.
Aunque la etnicidad y la genética juegan un papel, es importante tener en cuenta que la diabetes tipo 2 es prevenible o puede retrasarse a través de un estilo de vida saludable. Visite el sitio web de los CDC para obtener información adicional sobre cómo controlar y prevenir la diabetes.
Referencias:
https://www.cdc.gov/diabetes/spanish/index.html